Realizar al menos unos 30 o 40 minutos de ejercicio cada día es un hábito esencial para mantener un estado de salud óptimo. El cuerpo necesita actividad física para renovarse y estar siempre con energía, por lo que acudir al gimnasio es ideal para cumplir de una manera esta premisa básica para vivir bien.

Un estilo de vida activo es necesario para el bienestar del organismo. El sedentarismo es un gran enemigo para la salud, por lo que es importante añadir algunas horas de ejercicio a la semana para que el cuerpo pueda quemar calorías y mejorar la fuerza y la resistencia general.

El ejercicio brinda varios beneficios físicos, por ejemplo, el control de peso, la prevención de enfermedades cardiovasculares, el fortalecimiento de huesos y músculos, entre otros. Además, brinda varios beneficios psicológicos, como la mejora del estado de ánimo, control del estrés, mejora en las capacidades cognitivas y control de la depresión.

Una muy buena manera de mantenerse activo físicamente es ir al gimnasio frecuentemente, lugar donde se cuentan con todos los implementos ideales para una rutina de ejercicios más eficiente. Es posible tanto realizar entrenamientos intensivos, como una rutina sencilla para simplemente mantener una vida activa.

Acércate a tu gym más cercano y comienza a realizar una rutina de ejercicios adaptada a ti, todos los días. Al ser constante y entrenar al menos 40 minutos al día, es posible comenzar a notar resultados rápidamente. Una mente más centrada, un cuerpo con más energía, una persona más feliz y productiva, todo gracias al ejercicio.

Un regalo para el cuerpo y la salud

El ejercicio es uno de los pilares de la buena calidad de vida, junto a la alimentación y la hidratación. Caminar al menos unos 20 minutos al día es necesario para mantenerse funcionales, sin embargo, un ejercicio más frecuente y organizado es mejor para mantener una buena salud.

El mayor beneficio que ofrece el ejercicio diario es la fortaleza que brinda contra las enfermedades. Entre algunas de las afecciones que puede prevenir o combatir el ejercicio regular están los accidentes cerebrovasculares, la presión arterial alta, la diabetes tipo 2, la artritis, entre muchas más.

También puede reducir los efectos de caídas, y esto es debido a que los músculos, los huesos y demás tejidos del cuerpo se ven fortalecidos luego de las rutinas de ejercicio. Esto es de gran ayuda para obtener más rendimiento en otras actividades físicas, como los trabajos o los deportes, y brinda mayor energía al cuerpo en general.

El beneficio más notorio del ejercicio regular es la apariencia física. Acudir al gimnasio diariamente permite bajar de peso, tonificar músculos y realzar la figura, lo cual se traduce en una mayor autoestima. Es importante señalar que para lograr resultados en cuanto al físico, es necesario acompañar el ejercicio con una buena alimentación.

El ejercicio y la salud mental

Además de los beneficios físicos, el ejercicio diario también brinda varias ventajas en lo que a la salud mental se refiere. Y es que la actividad física es un antidepresivo natural. Las hormonas que se liberan con el ejercicio (serotonina, dopamina y endorfina) dan una sensación placentera y relajante, y a largo plazo, esto ayuda a aliviar los síntomas relacionados con la depresión y ansiedad.

Las tres hormonas liberadas por la actividad física también son de gran ayuda para el control del estrés. Además, estos químicos tienen la capacidad de regular el horario de sueño, lo cual es ideal para aquellas personas que sufren de insomnio. El humor y estado de ánimo mejorarán inmensamente gracias a todos estos factores, que en conjunto se traducen en una buena salud mental.

De igual forma, al realizar ejercicio en un gimnasio, se puede formar parte de un espacio social y de una comunidad, en la que se podrán conocer nuevas personas. Esto es ideal para mejorar las relaciones sociales y formar nuevos amigos, los cuales pueden ser simples compañeros de rutina o convertirse en amigos cercanos para toda la vida.